El poder de la validación

Por: María Belén Méndez, estudiante de la Universidad de los Andes

Seguramente en los días de cuarentena oíste la palabra “validación”. Tal vez como un consejo de algún amigo para acompañar las emociones fuertes de alguna persona con la que vivías. O tal vez como explicación para el sentimiento de insatisfacción que acompañaba el estar privado de los encuentros sociales.

Pues sí, la validación es uno de los muchos términos aparentemente novedosos que nos hemos cruzado a raíz de la pandemia. En redes sociales nos inundan las discusiones de la búsqueda de validación externa a raíz de la cuarentena, la importancia de validar para la convivencia e incluso algunos que dicen que es un error buscar validación….

Más allá de todos estos mitos y posturas por fuera de la evidencia científica, la validación es una habilidad interpersonal muy poderosa y es una necesidad natural del ser humano (Fruzzetti & Ruork, 2019).  Con la validación acompañamos al otro -sea a nuestro familiar, amigo o compañero- en la emoción, acción que es fundamental para la experiencia emocional del ser humano (Fruzzetti & Ruork, 2019).

¿Por qué hablar de validación?

La validación es un acto comunicativo hacia el otro. Validamos por el otro, por facilitar su experiencia, acompañarla y acercarnos a ella. Con esta habilidad, abrimos la posibilidad de dialogar y fomentamos la comunicación. Así mismo, construimos confianza e intimidad en nuestra relación. Además, le brindamos al otro auto-estima y confianza en sus propias emociones, lo hacemos sentir acompañado y aceptado (Linehan, 2015).

Entonces ¿qué es validar?

Validar es aceptar al otro y su estado mediante la empatía. Es una forma en que aceptas lo que siente el otro sin juicios, sin consejos y sin intenciones de cambiar (Linehan, 2015).

Y ¿cómo validar?

  1. Viendo y escuchando al otro.
  2. Expresando de forma precisa y sin juicios lo comprendido.
  3. Poniendo palabras a aquello que el otro no expreso.
  4. Reconociendo que siempre hay causas suficientes y justificables para el sufrimiento del otro.
  5. Reconociendo que la reacción del otro ha sido razonable en el momento.
  6. Dándole al otro el trato humano y digno que toda persona merece (Linehan, 2015).

Cuando ves el dolor o sufrimiento de otro, un gran regalo que puedes darle es la validación. No solo lo acompañas, sino que abres campo para que gestione sus emociones de una forma adaptativa, para el diálogo y para la búsqueda de soluciones.

La famosa validación es una habilidad interpersonal muy poderosa, en la que no solo facilitamos nuestra relación con el otro sino que también hacemos lo mejor que podemos para acompañarlo y ayudarlo en su experiencia emocional.

Por esto, te invitamos a que en la próxima situación en la que presencies el sufrimiento de otro, intentes validar su experiencia. Con esto verás el efecto de la compañía y la aceptación como herramientas para entender y ayudar a aquellos que nos rodean.

Fruzzetti, A. E., y Ruork, A. K. (2019). Validation principles and practices in dialectical behaviour therapy. In M. A. Swales (Ed.), The Oxford handbook of dialectical behaviour therapy (pp. 325–344). Oxford University Press.

Linehan, M. (2015). DBT skills training manual (2nd ed.). Guilford Press.

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